Se han empleado diversos términos para aludir a un síndrome de fatigabilidad fácil asociado con síntomas somáticos leves o debilitantes. Este síndrome fue descrito de un modo formal por los Centros de Control y Prevención de Enfermedades en 1988 como un síndrome de fatiga crónica debido a que el síntoma principal y constante es un profundo cansancio, que se puede acompañar de otros síntomas físicos y de un deterioro funcional prolongado.Este síndrome no es una enfermedad nueva ni el resultado del reconocimiento actual de enfermedades clínicas que antes pasaban desapercibidas y tampoco se debe a un microorganismo concreto, aunque en el diagnóstico diferencial se incluyen muchos procesos infecciosos y no infecciosos.