Si tienes alguna mancha o cicatriz; espinillas, barritos o cualquier otra imperfección, te comparto mi súper secreto para saber cómo maquillarte para ocultar imperfecciones y que así luzcas un rostro radiante.
No debes usar corrector muy claro, este llamará la atención; opta por el más parecido a tu tono de piel. Aplícalo en bolsas de los ojos, líneas de expresión o imperfecciones de tu rostro.
Existen distintas presentaciones para el corrector: Barra: cubre cualquier imperfección; hay que aplicar una pequeña cantidad y elegir un tono más claro al de tu piel. Es ideal para cutis jóvenes. Crema: su cobertura densa es ideal para ojeras e imperfecciones profundas. Líquido: es el más sencillo de usar y ofrece una cobertura media para tapar ojeras e imperfecciones como puntos negros. No es recomendable para pieles grasas. Polvo: los correctores en polvo son perfectos para tapar granitos en pieles grasas.
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Ahora colócate una base de maquillaje del mismo tono de tu piel o incluso un tono más obscuro.
Aplica tu base de maquillaje en los lagrimales y alrededor de la nariz y de los ojos; en la frente y barbilla. Difumina con una brocha.
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Por último, utiliza rubor en polvo, o blush, para terminar de cubrir tu rostro, aplica con pequeños golpecitos y sin deslizar mucho la brocha.
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Para evitar la aparición de otras imperfecciones, descarta con regularidad maquillajes viejos, mantén tus brochas y esponjas siempre limpias, lava e hidratada tu piel y no olvides desmaquillarte en las noches.