4 experimentos con bicarbonato que puedes hacer con niños

Cohetes con botellas de plástico: Para este divertido experimento con bicarbonato vas a necesitar: una botella de medio litro aprox, bicarbonato de sodio, vinagre, toalla de papel absorbente, un corcho o un cachito de espuma de flotador y una plataforma con palitos o con rejilla.
Después coloca aprox 1 - 2 tazas de vinagre en la botella y una cucharada de vinagre. Tapa con el cuadrito de espuma, agita un poco y deja en la base para que suceda el "despegue".

Huevos de Dinosaurio: Los niños aman los dinosaurios, por eso para este experimento necesitarás dinosaurios, bicarbonato (1 caja es suficiente para 3 huevos) , agua, colorante, jeringas, vinagre, un recipiente grande, jabón para platos y papel.
Lo que tienen que hacer es: pintar el bicarbonato con el colorante y después le agregas un poco de agua (1/4 taza aprox para una caja) hasta que se forme una pasta. Después envuelve al dinosaurio en esa pasta, coloca en un recipiente y congela hasta que endurezca.
Cuando los retires del refrigerador, deberás salpicar vinagre con la jeringa para que la magia suceda.

Arcoíris mágico: Para hacer esta manualidad colorida, necesitarás: Bicarbonato de sodio, agua, colorante de alimentos (líquido)Papel, Molde de silicón para muffins, guantes desechables, vinagre y jeringa.
Después, tendrán que empezar pintando el bicarbonato con el colorante y agregando un poco de agua para mezclar mejor y ve formando tiritas con cada color. Extiende sobre una charola para llevar al congelador y cuando pase el tiempo de congelado, rocía con la jeringa y vinagre para que la mezcla de colores se haga.

Volcán en erupción: Necesitarás: Vaso de cartón, Cutter, Plastilina gris, naranja, roja y verde fluorescente, ½ taza de vinagre blanco, ¼ taza de bicarbonato de sodio, Colorante líquido alimenticio rojo y Plato para la base.
Corta un vaso desechable, forma la base y forra con plastilina. Después decora como si tuviera lava en las orillas. Agrega gotas de colorante al vinagre y revuelve. Vierte en el vaso que forraste con plastilina y añade el bicarbonato. ¡La magia sucederá!