Remedios caseros para cuando tienes la cutícula reseca y maltratada

Que la cutícula esté reseca puede ser por razones como el clima, lavarse las manos con jabones abrasivos e incluso, por lavar los trastes sin guantes o con jabones que irritan la piel e incluso lejía o con cloro. Sin embargo, existen remedios caseros para la cutícula reseca, que puedes aplicar todas las noches para evitar que comience a desprenderse y así se formen los molestos pellejitos o también conocidos como padrastros. Dependiendo tu tipo de piel y qué tan reseca tengas la zona de la cutícula, puedes aplicar alguno de estos remedios caseros.

Paso a Paso

Paso 1
Limón y bicarbonato: Si has notado que la cutícula es demasiado gruesa o mucha, te recomendamos que tomes la decisión de quitarla con alicates o simplemente empujarla con un palito de naranjo, pero previo a cualquiera de esas dos cosas, puedes aplicar este remedio para cutículas dañadas. Mezcla el zumo de un limón con una cucharadita de bicarbonato, caliéntalo 30 segundos en el microondas y sumerge los dedos en la mezcla. Cuando retires, hazlo con agua tibia y da un masaje en la cutícula e inmediatamente hidrata con la crema más grasosa que tengas o con aceite de coco o aciete de oliva.
Paso 2
Azúcar y aceite de oliva: Puedes combinar una cucharadita de azúcar con media de aceite de oliva y dar un suave masaje en la zona de la cutícula, dejas reposar unos minutos y enjuaga con agua tibia. Esta receta además de hidratar y exfoliar, ayudará a que si la cutícula está demasiado endurecida, la puedas empujar hacia abajo o cortarla, según como hagas tu manicure.
Paso 3
Miel, sábila y aceite de oliva: Las cutículas pueden comenzar a resecarse por muchas razones y tal vez hasta por morderse las uñas o chuparse los dedos, por lo que se comienzan a resecar. Así que combina media cucharada de miel, media cucharada de aceite de oliva y media cucharada de extracto de sábila. Mezcla bien y aplica sobre tus uñas y cutículas. Puedes cubrir tus manos con una bolsa o con guantes y dejar actuar toda la noche.
Paso 4
Karité y cocoa: Una de las mejores formas de evitar que las cutículas se resequen y comiencen a desprenderse, es aplicarles la hidratación necesaria o un poco más, porque no olvidemos que al estar lavando las manos constantemente, las manos van resecándose y eso, por consiguiente, afecta la cutítcula. Puedes mezclar una cucharadita de karité y una cucharadita de cocoa, y aplicar todas las noches en toda la mano, cubrir con guantes o calcetines viejitos y comenzarás a ver la diferencia en unas semanas.
Paso 5
Dependiendo el tipo de manicure que hagas, ya sea que retires la cutícula o no, te recomendamos que siempre lo hagas con materiales totalmente esterilizados y limpios, ya que esto podría ocasionar alguna infección que comience por la cutícula y podría infectarse la uña.