Cómo hacer una pomada para desvanecer las cicatrices

Ingredientes para hacer una pomada de caléndula para las cicatrices: Hojas de caléndula Aceite de oliva o aceite de ricino Cera de abeja o karité Frasco con tapa hermética Ollita Bowl de vidrio para hacer baño María Palita de madera

Lo primero es conseguir la caléndula lo más fresca posible. Y después de lavarla, y que no esté chorreando de agua, mete las hojas en un frasco grande, con tapa hermética y cubre todas las hojas con el aceite de ricino, de oliva o aceite de almendras dulces. Cierra el frasco a la perfección y deja que macere por al menos 40 días en un lugar oscuro. Las propiedades de la caléndula son increíbles, porque además de favorecer la circulación de la sangre, ayuda a la regeneración pero sin modificar el pH de la piel. También es un antiséptico natural y contiene muchos antioxidantes, que son los que ayudan a mejorar el aspecto de la piel.

Pasado el tiempo, coloca agua en una ollita y cuando hierva, pon un tazón de vidrio que aguante el calor y vierte la preparación que se maceró. Debes vigilar que la preparación no hierva ni burbujee, sólo debe calentarse un poco. Añade la karité o la cera de abeja y deja que los ingredientes se mezclen entre sí. Estos dos ingredientes ayudarán a que la pomada para desvanecer las cicatrices, tenga consistencia más firme y sea sencillo de untar.

Esta pomada para desvanecer las cicatrices, sirve cuando tienes cicatrices que están muy rojas e incluso para las estrías rojas que quedan en la piel después del embarazo. También puedes aplicar sobre las cicatrices queloídes, que son abultadas y que seguramente te causan picor. Ya que si tienes cicatrices atróficas, que son las que quedan como pequeños hoyitos en la piel, puedes aplicar con suaves masajes todas las noches, y así se estimulará la producción de colágeno para que el tejido tenga mejor aspecto.